Música

Padre, hijo y espíritu rockero

Dos generaciones conectadas por la música

En su juventud, Caden Brugada descubrió su pasión por el rock pop gracias a The Beatles y formó parte de varios grupos sin saber que años después compartiría el escenario con su propio hijo, Patricio Brugada, quien heredó este amor por la música. Hoy ambos son parte de Pat and The Jurassic Band y en esta charla nos cuentan la historia de cómo se conformó esta agrupación nacional que tiene temas propios, múltiples influencias y varias generaciones en ella.

Por Mariela García. Fotografía: Fernando Franceschelli.

Normalmente, cuando uno escucha de bandas que se conforman, es porque se dio entre amigos, personas de edad similar, con gustos musicales parecidos o porque provienen del mismo coro o conservatorio. Con Pat and The Jurassic Band, la historia es un tanto diferente. Podría decirse que nació hace miles de millones de años, en 2012, y dos de sus integrantes son Caden y Patricio Brugada, padre e hijo, respectivamente, quienes viven y respiran la música, cada uno a su manera.

El pasado 1 de julio cumplió 70 años. Caden Brugada es escribano público de día y bajista por la noche. «No escogí esta carrera porque me apasionara; si era por mí, hubiese sido solo músico. Pero vengo de una época cuando debías tener necesariamente una profesión», nos cuenta. Siempre hubo una vena artística en él, ya sea con el dibujo, la pintura o la música. Quizás lo heredó de su propio padre, gran melómano de estilo folclórico, quien componía versos y con ayuda de otros le ponían la melodía.

Era otra Asunción, otros tiempos. Durante su adolescencia, junto a sus hermanos tuvo un grupo que se llamó Los Brugada, en el cual el menor tocaba el arpa, el mayor cantaba y ejecutaba la guitarra, mientras que él los acompañaba en la segunda guitarra. Sus presentaciones se daban en los acontecimientos familiares.

Caden Brugada. Fotografía: Fernando Franceschelli.

Pero a Caden le atraían otros estilos. Escuchaba grupos del estilo de The Beatles, “esos melenudos”, como los llamaba su papá con desaprobación, y quería experimentar con instrumentos como la guitarra eléctrica. Su padre nunca le prohibió nada, pero el cabello largo no era negociable y tampoco compartía sus gustos musicales. «No me considero solo un fan de The Beatles, soy un estudioso. Con ellos conocí el buen rock, marcaron un antes y un después en mi vida», nos confiesa.

«En el año 69 fui por primera vez a los EE. UU. y volví con otra mentalidad», prosigue. «Antes escuchaba siempre lo mismo, luego conocí a Jimi Hendrix, Steppenwolf y canciones que hablaban sobre rebeldía, pero yo nunca fui rebelde. Era la música en sí lo que me atraía, el ritmo que tenía el rock and roll», detalla.

Cuando empezó a trabajar, compró su primera guitarra eléctrica. También probó con el teclado, pero lo tuvo que dejar. «La música, si la abandonás, también te abandona. Pero si querés volver, siempre te recibe», afirma. A finales de los 80 e inicios de los 90, junto al baterista Guillermo Hoja Rojas, formó parte de otros grupos musicales como The Deeks, donde tocaban blues, y Year Blues, en el cual hacían covers.

«La música, si la abandonás, también te abandona. Pero si querés volver, siempre te recibe».

Caden Brugada.

Por aquel entonces también tenía una habitación solo para la música, donde practicaba sus instrumentos y guardaba todos sus discos: Creedence, The Police, Led Zeppelin, Eric Clapton y The Beatles, por supuesto, junto a equipos de sonido, amplificadores y revistas. Aquella experiencia con su papá le enseñó a Caden a disfrutar de estos momentos solo, sin saber que un joven Patricio, curioso, también se sentía atraído por la música.

Un día le pidió que le enseñara algunos acordes en la guitarra eléctrica. “A mí me empezó a interesar más la música, conocí otras bandas por mí mismo, con mi grupo de amigos; cantaba sobre la pista de las canciones y entonaba. Nació en mí un deseo de ejecutar el instrumento y cantar», nos cuenta Patricio.

Caden lo inscribió en clases de guitarra para que tuviera una base más técnica con el instrumento. Pero como en la adolescencia lo queremos todo ya y Patricio estaba ansioso por aprender sobre blues rock más que guitarra clásica, tomó su propio camino.

“A mí me empezó a interesar más la música, conocí otras bandas por mí mismo, con mi grupo de amigos; cantaba sobre la pista de las canciones y entonaba. Nació en mí un deseo de ejecutar el instrumento y cantar».

Patricio Brugada.

«Lo de la voz fue por caradura», agrega. «Nunca estudié vocalización y no tenía como base ni el coro del colegio. También siempre quise escribir mis propios temas, pero nada me convencía», relata.

En esos años el matrimonio de Caden llegó a su fin, pero la relación entre padre e hijo siempre fue muy fuerte, sobre todo gracias a la música.

Cuando Patricio estaba terminando el colegio, en 2006, se dio algo interesante: Year Blues —el grupo conformado por su papá, un amigo y otras personas— quedó sin algunos integrantes. El baterista, Hoja, animó a Patricio a componer unos temas. Emocionado, grabó cinco, «en un programa básico de la computadora», de los cuales fueron elegidas dos canciones para plasmar un demo ese mismo año. Pero tras este material y una presentación en vivo, el proyecto quedó ahí.

Pasaron los años, hasta que en 2012 les llegó una invitación para presentarse de nuevo. Con los dos temas grabados seis años antes, algunos covers y una nueva composición de Patricio llamada Hanging On, se presentaron. Con los ensayos la llama se reavivó y pronto los tres se dieron cuenta de que les faltaba un nombre.

Patricio Brugada. Fotografía: Fernando Franceschelli.

Pat and the Jurassic Band

Una vez, el papá le preguntó a su hijo por qué quería tocar con unos viejos. Y de ahí proviene el nombre Jurassic, ya que tanto Caden como Guillermo son mucho mayores que Patricio. Este le comentó una idea que tenía en su mente, sobre un joven cantando y que los músicos que lo acompañaran sean ya bien entrados en años.

En lo sucesivo, la banda contó con integrantes que fueron yendo y viniendo. Desde el 2014 y 2015, está integrada por Patricio Brugada, voz principal y guitarra rítmica (y abogado de día); Caden Brugada, bajo y voces; Guillermo Hoja Rojas, batería; José Ferro, armónica y coros, y Rodolfo Heyn en la guitarra principal, quien proviene de una dinastía de guitarristas. Si bien Caden era también guitarrista, aprendió a tocar el bajo por su beatle favorito, Paul McCartney. Además, el puesto estaba muy bien ocupado por otra persona.

La edad de los integrantes es la fuente de los chistes con los que rompen el hielo en el escenario. Otra de las particularidades son dos dinosaurios de juguete que suben a los escenarios con los cinco integrantes. Son pequeños, solo visibles para aquellos en el público que se fijan en los detalles.

«Lo admiro mucho, porque yo jamás le animé a cantar. Él es un frontman natural y hace parecer que las cosas son fáciles».

Caden sobre su hijo.

Cuando se presentan, están sumergidos en la música, se comunican con señas y, antes de subir, cada uno tiene sus cábalas. Se describen como autocríticos y siempre están buscando qué mejorar. A esto, Patricio añade que «todas las veces que entramos al escenario tenemos los nervios de la primera vez, eso es muy importante no perder». Sea una audiencia pequeña o un público más grande, ellos lo dan todo.

«Lo admiro mucho, porque yo jamás le animé a cantar. Él es un frontman natural y hace parecer que las cosas son fáciles», expresa Caden sobre su hijo, por su parte.

Ambos coinciden en que lo más gratificante es sentir que al público le gustó su música y el aplauso de todos los presentes. Y es que la esencia de la banda son los temas propios. Según el lugar, a veces abren sus presentaciones con algunos covers para captar la atención de la gente y después pasan a ejecutar sus creaciones propias.

«Sería bueno que las creaciones que se hacen acá y que los grupos con temas propios, tanto en español como en inglés, puedan ganar más espacios».

Patricio Brugada.

«A veces nos preguntan si hacemos tributos a bandas, pero no queremos confundir al público, sino compartir lo que hacemos nosotros mismos», aclara Patricio. Sin dudas es un camino difícil, pero ellos siguen andando. «Sería bueno que las creaciones que se hacen acá y que los grupos con temas propios, tanto en español como en inglés, puedan ganar más espacios», agrega.

La satisfacción para ellos es crear y experimentar, como un juego entre la letra y la música. Patricio lleva la base de las canciones, pero todos aportan lo suyo. Los temas tratan de amor y desamor. «Hay veces que narro una historia de la nada y logro que algunos se identifiquen», nos cuenta. En cuanto al estilo, navegan entre el rock pop y un poco de blues, que representa en su mayoría los gustos e influencias de los integrantes.

Después de tanto tiempo, se consideran amigos. Hay mucha confianza y ganas de seguir creando. Pero entre padre e hijo, la relación es aún más fuerte. «Yo siento que toco, más que con mi papá, con un amigo. Tanto tiempo llevamos haciendo esto que para mí es algo natural. Cuando alguien me pregunta qué se siente tocar con él es que piso tierra y pienso: ‘Esto es muy bueno’. Es algo increíble y genial», expresa Patricio.

Fotografía: Fernando Franceschelli.

Los ensayos son toda una experiencia para ellos, ya que suelen estar de acuerdo en el 90 % de todo lo que se habla allí. «Algo que nos pasa es que a veces tengo las mismas ideas que él y, cuando alguien lo contradice, no sé qué hacer porque van a pensar que lo defiendo porque es mi hijo. No quiero simplemente darle la razón, pero sí puedo afirmar que existe esa conexión», refiere Caden.

Estas prácticas se dan con más frecuencia antes de una presentación. A veces realizan sesiones en distintos lugares, a las que llaman Dino Sessions, donde tocan los temas que consideran clásicos de la banda como Baby You Can Drive Tonight, Heat y Uncle Tom. Pat and The Jurassic Band participó de los festivales más grandes de la escena local, que fueron la primera edición del Kilkfest, Asunciónico, Cosquín Rock, Reciclarte, entre otros. «Una asignatura pendiente para nosotros es tocar en otras ciudades del país», manifiesta Patricio.

En el grupo, cada uno tiene su rol y en 11 años trabajaron en materiales que están disponibles en todas las plataformas, como Spotify, Deezer y Apple Music, junto con dos EPs: Volumen I, lanzado en 2015 con cinco temas, y Volumen II, presentado en 2018, con cuatro composiciones. También hay dos videoclips disponibles en YouTube.

Ahora, Pat and The Jurassic Band está por lanzar un nuevo material, Volumen III, que verá la luz entre agosto y setiembre próximos.

Recomendados

Sin Comentarios

    Dejar un comentario