Carlos Porky Ayala es licenciado en Nutrición, personal trainer y atleta amateur.
Dos palabras que te definen: Trabajador y positivo.
Un libro que te marcó: El arte de la guerra, de Sun Tzu.
Comida favorita: Bife de lomito a caballo con arroz al ajo.
Destino nacional favorito: San Ber fuera de temporada.
¿Cuál es tu frase favorita?
“Si no crees en ti mismo, nadie más lo hará”.
¿En qué consiste tu régimen de entrenamiento actual?
Movilidad, 45 minutos de entrenamiento de fuerza y, si queda tiempo, una caminata leve. Trato de que mi rutina sea algo que me dé energía y no que me agote, como lo
hacía antes.
¿Cuáles son tus «permitidos»?
Sí o sí algo dulce, puede ser helado. O también sushi.
¿Qué es lo más gratificante de tu trabajo?
Los resultados, que a veces se plasman en números, y otras, en el bienestar: una persona que aprendió a comer duerme mejor, se relaciona mejor con los demás, mejora su autoestima y hoy siente confianza para sacarse la remera frente a su pareja o irse a la playa.
¿Cuál es tu principal enseñanza a tus clientes?
Equilibrio. Tratar de ser consistentes de sus objetivos pero, a la vez, aprender a descansar, tomar una pausa, porque muchas veces sirve para impulsarse.
¿Y en qué momento te tomás vos esa pausa?
Los fines de semana trato de estar con mi familia, ir a misa y salir a comer, pero me encanta mi rutina. No cambiaría mi vida por más que muchas veces termine agotado, ¡amo lo que hago! Al final del día me tomo una pausa para agradecer y relajarme antes de dormir.
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