La hora de la desaparición
Que el estilo retro no te engañe, porque La hora de la desaparición es una oscura pesadilla que va tomando forma bajo la dirección impecable de Zach Cregger (Barbarian) y la excelente interpretación de sus protagonistas. Este domingo te adelantamos un poco de lo que vas a ver en la gran pantalla.
Cuando todos los niños de la misma clase, excepto uno, se esfuman de una forma misteriosa la misma noche a las 2.17 de la madrugada, queda una pregunta en el aire de la comunidad: ¿Quién o qué está detrás de su desaparición?
La primera idea que germinó y se convirtió en La hora de la desaparición llegó a la mente de su creador, guionista y director Zach Cregger mientras lidiaba con el duelo por la muerte de uno de sus mejores amigos. “Creo que hay momentos en que los guionistas escriben con ambición, y quizá no sea la forma más saludable de hacerlo, desde el punto de vista creativo. Yo estaba en una situación tan grave y dolorosa que pude escribir por pura necesidad, sin tener ni idea de lo que iba a ser”, recuerda.

El nombre de Cregger no es extraño para los cinéfilos, también es responsable de otro éxito reciente del cine de terror, Bárbaro (2022). “Después de Bárbaro realmente quise que lo siguiente fuera algo que me retara a ser más grande, mejor. Deseaba hacer algo mucho más ambicioso, no solo en términos de tamaño y escala, sino con más partes movibles y una estructura mucho más desafiante. Quise que fuera arriesgada, pero igual de demencial”, acota. En vez de jugar a lo seguro, él siguió la dirección contraria: “Estoy muy orgulloso de decir que es una película más grande y rara que Bárbaro, y eso es más o menos lo que tenía en mente cuando empecé a escribirla”.
El director considera que La hora de la desaparición es una película interesante porque, en realidad, hay siete protagonistas. “Cada uno es la estrella durante su pequeña porción de 12 minutos. Entonces, las personas que se seleccionaron en el casting fueron las elegidas para ser protagonistas del show”, explica. Los dos más frontales, al principio del filme, son Julia Garner y Josh Brolin.

Brolin llegó a este proyecto sin haber visto Bárbaro, así que lo que lo atrapó en realidad fue el cautivador guión. “Me reuní con Zach y sentí como si fuera un libro abierto. Él se presentó como diciendo ‘este soy yo, es lo que soy, aquí es donde estoy en mi vida, esto es por lo que he atravesado, de aquí surgió la historia’. Y eso fue lo que me generó mayor interés, a lo que aludió en nuestra primera reunión y que luego amplió cuando nos volvimos a ver: que cada personaje representaba una parte de él, que lidiaba con la muerte de este amigo íntimo suyo”, menciona.
“Zach es un cineasta único”, dice Brolin, “creo que es un realizador muy inteligente, sensible y emotivo, con una gran habilidad para entender el diseño y la narración. Tiene personajes potentes, que representan algo esencial para el conjunto”. El actor, uno de los más celebrados de su generación, interpreta a Archer, el arquetipo de persona promedio que debe enfrentarse a la desaparición en masa de los niños. Archer es el padre de uno de los 17 estudiantes de primaria que se desvanecieron en la noche. Cuando siente que no se hacen los esfuerzos suficientes para encontrar a su hijo y a los demás, empieza a investigar por su cuenta.

“Pienso que eso crea un nuevo género que está surgiendo —donde también hay cineastas como Ari Aster— y que es verdaderamente fascinante ver a realizadores genuinamente interesantes e inteligentes que abordan de una manera diferente el mismo género, y todo eso es cíclico”, dice Brolin, quien asegura que estamos viviendo un ciclo del cine de terror y que le encanta estar involucrado con un creador que considera verdaderamente bueno.
“Creo que, de una manera extraña, esta no es solo una película de terror”, dice Julia Garner, quien da vida a la completa Justine, y agrega que “esto va a sonar muy raro, pero pienso que también es una historia de amor”. Justine es una profesora de primaria que una mañana entra a clases y se encuentra con que han desaparecido todos sus estudiantes, excepto uno. Por compasión hacia sus alumnos y con su reputación personal en juego, empieza a investigar por su cuenta.

A sus ojos, La hora de la desaparición tiene un tono interesante, similar a Bárbaro, pero lo que hizo que se comprometiera con este proyecto fue la originalidad: “Nunca había leído nada igual. Tengo la impresión de que las historias originales son cada vez más raras de encontrar en estos días”.
“No creo que todo deba ser de un solo color, puede haber tonalidades distintas. El estilo cinematográfico de Zach tiene mucho humor. Creo que la comedia y el terror son caras opuestas de la misma moneda”, describe Garner.

¿Por qué un aula completa de niños decidió, la misma noche, a las 2.17 de la madrugada, levantarse de la cama, bajar las escaleras, abrir la puerta principal, salir a la oscuridad y no volver? La respuesta te espera —quizás— en tu sala de cine favorita.
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